En la penumbra de la noche eterna,
se esconde un amor que el destino gobierna.
Dos almas perdidas en la vastedad,
unidos por la pasión, pero separados en realidad.
Sus miradas se cruzan como estrellas fugaces,
destellos de anhelos, sueños audaces.
Pero entre ellos se erige un muro de dolor,
un amor prohibido, un canto sin rumor.
En el jardín del tiempo florecen sus suspiros,
un amor imposible, lleno de giros.
Como mariposas danzando en la brisa,
se acercan, se alejan, su historia precisa.
El viento susurra secretos no compartidos,
canciones de amor en sus corazones heridos.
Aunque se aman en silencio, sin testigo,
la realidad les impone un cruel castigo.
Sus manos anhelan unirse en la penumbra,
pero el destino juega con su fortuna.
Como sombras que nunca se encuentran,
un amor imposible, que el universo entierra.
En el lienzo del tiempo, su historia se pinta,
un cuadro de amor que la vida tinta.
Pero el lienzo se desgarra con la distancia,
un amor imposible, sin esperanza.
Así perduran en la eternidad,
dos almas que se aman en la soledad.
En el teatro del amor, un trágico acto,
un amor imposible, un eterno pacto.
Derechos Reservados @Alex V